¿Sabías que todos nacemos con hemorroides?
La enfermedad hemorroidal es la enfermedad proctológica más frecuente, es la causa más común de consulta a los especialistas en enfermedades de colon y recto que buscan un tratamiento de hemorroides.
Las hemorroides son plexos compuestos por venas y arterias localizadas en el ano que se les conoce popularmente como almorranas con las cuales nacemos
A menudo, la inflamación de las hemorroides es consecuencia del esfuerzo para evacuar, aunque pueden ser causadas por otros factores como el embarazo, el estreñimiento crónico, diarrea y el propio envejecimiento.
Los principales síntomas de la enfermedad hemorroidal es el sangrado rojo brillante que suele estar acompañado de evacuación. Otros síntomas pueden ser comezón, sensación de cuerpo extraño, salida de moco y en ocasiones pueden doler de forma importante cuando se complican.
Si tienes alguno de estos síntomas no lo pienses más y acude con nosotros.
El tratamiento para la enfermedad hemorroidal varía según la gravedad de la condición. Existen opciones conservadoras, mínimamente invasivas y quirúrgicas.
Tratamientos conservadores:
Modificación de la dieta: Se recomienda una ingesta elevada de fibra para mejorar el tránsito intestinal y evitar el estreñimiento. Esto incluye frutas, verduras, legumbres y cereales integrales.
Aumento de la ingesta de líquidos: Beber suficiente agua ayuda a mantener las heces suaves.
Ejercicio regular: La actividad física puede ayudar a prevenir el estreñimiento y la formación de hemorroides.
Tratamientos tópicos:
Existen cremas y supositorios que pueden aliviar el dolor, la picazón y la inflamación. Estos productos suelen contener ingredientes como hidrocortisona o hamamelis.
Procedimientos mínimamente invasivos:
Escleroterapia: Consiste en la inyección de una solución química en las hemorroides para reducir su tamaño.
Ligadura con banda elástica: Implica colocar una banda elástica alrededor de la base de la hemorroide para cortar su suministro sanguíneo y hacerla disminuir.
Coagulación infrarroja: Utiliza luz infrarroja para causar la coagulación de los vasos que alimentan las hemorroides.
Tratamiento quirúrgico:
En casos severos o cuando los tratamientos conservadores no resultan efectivos, puede ser necesaria una hemorroidectomía, que es la extirpación quirúrgica de las hemorroides. Este procedimiento se realiza bajo anestesia.
Es fundamental consultar a un especialista en enfermedades del colon y recto para un diagnóstico adecuado y para discutir el tratamiento más adecuado según cada caso particular. La atención oportuna y el tratamiento adecuado pueden ayudar a aliviar los síntomas y mejorar la calidad de vida.